Antes que nada, me presento: soy Javier Padilla y estoy a punto de escribir mi primera novela.
Es un reto importante… ¡Sí! Ya sé que todos pensaréis que escribir un libro es siempre un reto importante, pero en este caso es verdad de la buena por una razón muy concreta: las tres veces anteriores abandoné antes de llegar a la mitad de la obra. Unas veces porque no era el momento de mi vida para escribir, otras porque la historia no me convencía y, la más importante de todas, porque no estaba siendo un lector aplicado.
Es imposible escribir algo decente sin leer de forma indecente. Ahora lo tengo clarísimo.
Por eso se podría decir que nadie da un duro porque acabe esta vez. Y eso me quita presión, así que vamos bien.
En el momento en el que volví a devorar historias de forma regular, todo empezó a cambiar en positivo. Me enganché al Kindle allá por la primavera de 2015. Cayeron algunas sagas famosas —entre ellas, Harry Potter— y otras obras más inspiradoras como la biografía de Elon Musk, Jony Ive o Alan Turing. Este último me parece un personaje fascinante y una figura que se debería estudiar en todos los colegios.
Comencé a fijarme mucho en las portadas de otras obras, a leer fijándome en la estructura de la prosa y bla bla bla.
Creo que la génesis de esta historia arranca en algún punto mientras leo IT (Stephen King). No tengo ni idea de cuándo la acabaré, aunque sí me gustaría que estuviera lista para el próximo verano. Lo que sí tengo claro es que voy a hacer un libro ligero, entre 200 y 250 páginas.
¿La temática de la novela? Algo que controlo bien: niños y hackers. Más específicamente, niños-hackers o jóvenes-hackers. Estoy decidiendo ahora la edad de los protagonistas, su personalidad, sus inquietudes, etcétera.
No sé demasiado aún sobre la historia, aunque creo que intentaré crear una aventura que se prolongue durante varios libros.
Os iré informando por aquí.
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