Del interrogante (¿Qué hace mi libro ahí?) a la exclamación (¡Qué hace mi libro ahí!) solo transcurrieron unos minutos. Muy pocos.
Fue el tiempo que dediqué a pasar por varios estados intermedios: euforia (¡Alguien se ha tomado tiempo para piratearme!), desconcierto (¿Será esto positivo porque me puede ayudar a que más gente se una a la saga?), indignación (¡Malditos! No tendrán 5 p**** euros) y resignación (Es una pena, pero no puedo hacer nada…).
Durante el proceso de creación se luchó para que el precio de esta obra fuera asequible. Por eso se puede comprar legalmente por 4,75€ en formato electrónico o a 15,95€ en tapa blanda.
No hay que ser un experto en buscadores para encontrar decenas de sites que ofrecen gratis mi libro.
Siendo autor de una novela sobre hackers y un apasionado de la tecnología, pronto caí en que hay máquinas que hacen esto de forma automática. Hasta hace pocos años esto se hacía “a mano”. En las noticias salía que una versión digital de Harry Potter y [ponga lo que proceda] había sido robada y publicada en Internet varias semanas antes de llegar a las estanterías. Si con ese nivel de producción editorial era imposible impedir que se filtrara y se colgara el material, ¿quién soy yo, Javi Padilla El Desconocido, para frenar esto?
La piratería es una consecuencia; la falta de educación es la causa. En medio estamos nosotros.
Cuando les digo a mis alumnos cosas como “bajar una película pirata es como romper el cristal de un coche para robar unas gafas” me miran raro. No asimilan “ver algo sin pagar” a “robar”. ¿El origen? No se valora el esfuerzo intelectual. No pensamos que alguien sentado, tecleando, soñando y compartiendo su historia esté haciendo algo que se deba remunerar.
Si no pensamos que a los creadores de emociones hay que pagarles, ¿en qué mundo estamos? Esto no solo pasa con películas y música, sino también con videojuegos, libros y cualquier cosa que se pueda convertir en digital.
Y aunque, por un momento, se nos pasara por la cabeza que ese creador no merece cobrar, ¿qué hay de los editores, impresores, ilustradores, libreros…? Ocurre al igual que en el cine o la música: nos conformamos con pensar que “ya ganan mucho dinero”, como si los transportistas, iluminadores, maquilladores, electricistas, sastres y demás no fueran asalariados como tú y como yo.
Transformar ideas, contenidos y emociones en ceros y unos es el primer paso antes de que un alto porcentaje de personas piensen que algo ya es gratis. Gracias a Spotify, Netflix, HBO, Storytel y otros comenzamos a pensar que es lógico pagar por consumir contenido.
Aunque resulte paradójico, me gustaría dar las gracias a un 10% de la primera persona que decidió subir mi libro en PDF o ePUB a una web o lo envió por correo a un amigo. Una parte de ti hizo lo correcto: compartir con otros algo que nos gusta. Quiero pensar que en el origen de la piratería está la generosidad…
¿Hay modo de conseguir una versión digital cuando has comprado la versión en papel?
Me estoy leyendo el libro que compré para mi hija, pero me cuesta usar el libro cuando siempre leo en el Kindle, Tengo el 1 y el 2, y en cuanto acabe voy a por el 3 y los siguientes.
Sería bueno que pudiéramos tener las dos versiones cuando los compramos 🙂
Hola, David,
Este es un tema que controla la editorial y se venden por separado. De todas formas, dentro de poco estará la versión Kindle a 0.99€. Avisaré para quienes quieran tenerla.
Y también estará dentro de Kindle Unlimited (gratis si eres suscriptor de esa modalidad).
Gracias por leer 🙂
Buenos días Javier, he sabido de tus libros a través de una red social. No me gusta piratear libros, pero tampoco comprar libros y después que al niño no le atrape y lo dejé en la estantería. Me ha pasado con bastantes, así que mi petición es solo si puedes enviarme el primer capitulo o las primeras hojas, para ver si al niño le gusta y después los compraré encantada.
A mí me ha parecido super interesante, para que se adentré tb en el mundo de la programación.
Gracias por tu atencion
Hola Coral,
Muchas gracias por tu sincero comentario. Me parece muy sensato lo que dices. Ahora te envío el primer capítulo del primer libro a tu correo electrónico.
Un saludo 🙂
El modelo mercantil cultural es el que está mal diseñado desde la base. No busquemos culpables en nuestros potenciales lectores, pues es muy satisfactorio que nos lea todo el mundo. Obviamente escritores, como cualquier otra persona que aporta valor, como si no, necesita subsistir, pero el remedio es otro.
Una lástima que alguien que escribe sobre hacking, llame pirata a quienes hacen uso legítimo de su derecho a la copia privada. No debería darse alas a los discursos de la SGAE y hacerlos propios, como es tu caso.
Quizá en un futuro publiques con Openlibra.
Y es que al final, programas o te programan. Un saludo.
Hola Jusore,
Gracias por compartir conmigo tu opinión. Evidentemente, no estoy llamando “pirata” a quien hace uso legítimo de su derecho a la copia privada.
Llamo “pirata” a quien roba. ¿Qué es robar? Tener mi trabajo de varios meses sin mi permiso.
¿Sabes una cosa? Ha habido personas sin recursos que me han pedido un ejemplar y me las he apañado para que lo tengan.
Si tienes una idea que premie a escritores y lectores y permite una mejor difusión de las obras originales, bienvenida sea.
Gracias 🙂
Javi Padilla
Buenas tardes,
Estamos interesados en tener su libro en nuestra librería de Madrid. Tenemos encargos pero no conseguimos encontrarlo en los proveedores que tenemos. Muchas gracias y un saludo!
Hola Ana,
Muchas gracias por tu interés. Te contactamos por email y te enviamos algunos ejemplares.
¡Buen finde!